Chrissy Teigen sufre depresión postparto

La modelo ha confesado desde las páginas de Glamour USA que aún está siendo tratada por este trastorno.

Cada vez son más las celebrities que se sinceran sobre un trastorno que afecta a 1 de cada 10 madres y que, hasta hace muy poco, era prácticamente un tabú. Adele hizo lo propio hace meses y ahora ha sido Chrissy Teigen quien, desde la edición americana de Glamour, ha revelado que todavía padece esta depresión y continúa en tratamiento por ella.

La modelo ha hecho esta confesión con una emotiva carta abierta con la cual quiere normalizar una situación que no por común deja de ser grave.

La depresión de Chrissy no fue inmediatamente después del nacimiento de Luna, que tiene ya 10 meses. Empezó a perder el apetito, las ganas de hacer cosas y solo salía de casa cuando era estrictamente necesario. Antes de las vacaciones de verano fue diagnosticada y comenzó con una terapia con la cual aún continúa.

"Recuerdo estar tan agotada pero feliz porque finalmente podía situarme en el lugar de mejorar. John también estaba emocionado con ello. Empecé a tomar antidepresivos, que ayudaron. Y comencé a compartir con mi familia y amigos lo que pasaba, sentía que que necesitaban una explicación y no sabía cómo comunicarlo de otra manera: simplemente diciéndolo", confiesa. "Todo fue mejorando y mejorando según fui contándolo. Todavía no me gusta decir 'tengo depresión postparto' porque la palabra depresión asusta a la gente. A veces lo llamo solo 'postparto'. Pero quizá debería empezar a decirlo y así sería una manera de borrar el estigma", continúa.

Muchas de las mujeres que padecen este trastorno no quieren ni siquiera confesar que lo están sufriendo. Cuando se acaba de tener un hijo lo 'normal' es estar feliz ante un acontecimiento así pero los cambios físicos y hormonales no siempre llevan a ese estado de ingravidez maternal, de ahí el tabú a la hora de hablar de ello. Son muchos los sentimientos encontrados que sufren estas madres y el hecho de que otras hablen públicamente contribuyen a la normalización de un problema tan frecuente como grave.